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Cultura oriental, Fotografías Thailandia, Thailandia, vacaciones
Estamos en la última entrega fotográfica de este gran viaje, que compartí con una de las personas que más quiero en esta vida, mi hermana Isa. Puedes ver más fotografías en la 1º y 2º parte de este post.
Resumir 3 meses de experiencia no es fácil, aunque tampoco ha sido mi intención, solo he querido explicar brevemente que situaciones puedes llegar a vivir cuando desconoces por completo la tierra que estas pisando, cuando vas de un lado a otro mano a mano con otra persona que, aunque sea de la familia y el amor está implícito, no implica sin problemas y, por supuesto, la aventura de tirarse al barro a descubrir nuevas culturas, países y gentes.
Llegar a las maravillosas playas de Thailandia fue un respiro para nosotros. El norte no ofrecía paz interior, poca cultura y mucho trasiego para tan poca chicha. Finalmente, y antes de lo previsto, nos lanzamos a una de las islas más bonitas del país, Khophangan; ¿qué decir después de recorrer kms de carreteras desbordadas de baches, en autobuses con cristales rotos, a una velocidad de 40 km por hora y cientos de personas con las que la comunicación se basaba en signos y señales? Un verdadero respiro.